La Alcaldía de Bucaramanga presentó una denuncia ante la Fiscalía, tras el hurto de más de 2.000 metros de cable del sistema de cámaras de seguridad de algunos sectores de la ciudad. Así lo confirmó el secretario del Interior, Gildardo Rayo, quien explicó que este delito ha afectado la capacidad de monitoreo en sectores claves del municipio.
“Estos robos no solo inutilizan equipos, sino que dificultan los procesos judiciales, pues las cámaras son herramientas clave para lograr capturas, seguimientos e incluso allanamientos”, señaló el funcionario.
El funcionario indicó que los actos de vandalismo se han presentado en distintos barrios de la ciudad, donde delincuentes han cortado cables, lanzado piedras, incluso disparado a las cámaras, y en otros casos, las han manipulado para desviar su ángulo de enfoque.
Desde la Secretaría del Interior municipal confirmaron que se encuentran recopilando todo el material probatorio por parte de policía, por parte del contratista de estás cámaras, inclusive de la comunidad que tiene conocimiento cuando se da cuenta que llegan delincuentes a vandalizar estos cables, para así entregarle todo este material a la fiscalía y que se inicie la investigación.
Bucaramanga cuenta con un total de 808 cámaras de seguridad, de las cuales cerca del 53 % se encuentran en funcionamiento óptimo. Según el secretario, cuando inició la administración actual solo estaban activas 120 cámaras. Por los trabajos de recuperación y mantenimiento, la cifra ha aumentado a unas 428 operativas, aunque alrededor de 100 presentan novedades menores, como obstrucción por telarañas o desplazamiento de enfoque.
La prioridad es mantener siempre estos equipos a un 80 o un 90% en funcionamiento, dado que muchas de las capturas, desarticulación de bandas, allanamientos y material probatorio que han logrado establecer, se han desarrollado a través de investigaciones por estos medios tecnológicos.