En este mes de junio se conmemora el Día Mundial del Donante de Sangre, una fecha que invita a sumar esfuerzos para salvar vidas como un ejemplo de solidaridad hacia el prójimo. Sin embargo, la Organización Panamericana de la Salud (OPS), alerta que durante el primer año de la pandemia las donaciones de sangre disminuyeron un 20% en América Latina.
Una cifra que demuestra que se debe concientizar sobre la importancia de la donación, fundamental para aquellas personas que requieren una transfusión de sangre, en especial para pacientes con diagnósticos oncológicos, accidente de tránsito, accidente por armas o hemorragias agudas, entre otros dictámenes médicos.
Esta es una tarea fundamental que se convirtió en un verdadero reto, ya que debido al covid disminuyó el número de voluntarios en un 80% durante el 2020 y en lo que va del 2022 se han realizado 153.363 transfusiones en el país.
Las anteriores cifras demuestran que se debe crear una cultura de donación y un llamado a la sociedad para que se sume a esta valiosa labor.
Una bolsa de sangre puede salvar alrededor de tres o más personas, es una fuente de vitalidad que también brinda algunos beneficios para la salud de quienes deciden ser voluntarios: Mejora la circulación. Oxigena los órganos. Renueva algunos componentes de la sangre. Estimula la producción de nuevas células.
Desde el Gobierno departamental invitaron a los santandereanos a contribuir con su granito de arena para ayudar aquellas personas que requieren una mano amiga como un acto de solidaridad.
Quienes quieran ser donantes voluntarios pueden dirigirse al Hospital Universitario de Santander y deben tener en cuenta los siguientes requisitos:
Ser mayor de 18 a 65 años. Pesar más de 50 kilos. No estar en periodo de gestación o embarazo. Esperar 12 meses si se realizó tatuajes o piercing. Tener un buen estado de salud.