El jefe natural del Centro Democrático, dio a conocer un borrador con 17 puntos que contiene consideraciones y sugerencias para el Gobierno.
El expresidente Álvaro Uribe dio a conocer un borrador con 17 consideraciones sobre la reforma a la salud; esto en medio de la polémica que ha generado el proyecto que enarbola el Ministerio de Salud, en cabeza de la ministra Carolina Corcho.
El documento del proyecto no se ha conocido de manera oficial y tampoco ha sido radicado ante el Congreso, pero ya ha generado una gran inquietud entre diferentes sectores: las EPS, algunos usuarios e incluso miembros opositores.
Precisamente, el jefe natural del Centro Democrático ha expresado sus inquietudes sobre este proyecto. Lo hizo durante la reunión que tuvo con el presidente Gustavo Petro el pasado viernes 3 de febrero y ahora a través de un documento detalló algunas de sus reservas sobre la iniciativa que espera reformar al sistema de salud colombiano.
En total, el expresidente enunció 17 puntos que pone a consideración para hacer «ajustes sin desbarajuste», así lo afirmó. El principal asunto en el que insiste es que «la solidaridad y la eficacia social son más alcanzables en los sistemas mixtos que en monopolios estatales».
«Este documento tiene solamente una pretensión: contribuir a este debate de la salud que se está adelantando en Colombia», señaló el exmandatario.
A continuación, los temas que expone en el borrador:
1- El Sistema de Salud ha logrado dar más y mejor atención a los ciudadanos que antes pagaban de su bolsillo el 55% de los costos y ahora el 16%.
2- El Sistema es solidario: El Estado y los empleadores pagan la mayor parte, el trabajador la cotización mínima y los compatriotas informales casi no pagan. Sin importar el nivel económico todos tienen derecho a los mismos servicios.
3- El Sistema es mixto: hay entidades estatales, privadas, mixtas y sin ánimo de lucro.
4- Así como hay entidades de excelencia, ha habido corrupción y politiquería en hospitales, en EPS privadas, estatales y cooperativas. Muchas han desaparecido.
5- Desde el Gobierno anterior se emprendió una lucha eficaz contra la corrupción.
6- La propuesta anunciada llevaría a que las personas para acceder a la salud tendrían que acudir a fondos regionales, organismos de monopolios burocráticos estatales.
7- Lo anterior puede llevar a unos costos impagables por la explosión burocrática. Sin EPS se debilitaría la racionalidad para utilizar el servicio. Además, en un monopolio estatal aumentaría el peligro de crecientes influencias politiqueras para obtener citas, acceso a especialistas, a procedimientos y cirugías.
8- En monopolios estatales se aumenta el riesgo de corrupción con sobre facturación y toda clase de costos excesivos.
9- El nuevo sistema sería insostenible. Al cabo de un tiempo, por agotamiento de recursos, obligaría a las personas a pagar más de su bolsillo o a quedarse sin servicio.
10- No se ve lógica ni se anticipa eficiencia en el manejo que harían esos fondos regionales estatales sobre incapacidades, remisiones, etc.
11- Los sistemas estatales en el mundo también tienen demoras y mayores que en Colombia. No obstante, en nuestro medio, la tutela, la posibilidad de que sea norma general o precedente para que no se tenga que repetir, la depuración y el mejoramiento del Sistema, van mostrando menos demoras que en otras partes del mundo.
12- Las buenas EPS, que van quedando, cobran máximo 3,5% por toda su actividad. El monopolio estatal propuesto costaría mucho más. La EPS deberían estar condicionadas a una certificación de excelencia.
13- Hay informes que registran que el Sistema presta aproximadamente 40 millones de servicios al mes, y hay meses de 60 millones de facturas; poner esto en un monopolio estatal sería condenar al desorden y a más demoras en pagos.
14- Compartimos que se necesitan ajustes para mejorar la medicina preventiva y las condiciones de los compatriotas que laboran en la salud.
15- Hay ensayos que acreditan la eficiencia en medicina preventiva de alianzas estratégicas entre municipios, departamentos, EPS, hospitales, fundaciones, cajas de compensación, etc. Generalizar el trabajo coordinado de todos estos actores, daría mejores frutos que un monopolio estatal.
17- Para mejorar las condiciones de los trabajadores no se debería eliminar el contrato sindical sino ajustarlo. Esta forma de contratación, tanto en el sector privado como en el público, supera tensiones entre capital y trabajo, entre empleadores y funcionarios, permite que quienes trabajan sean los beneficiarios de la tercerización, en definitiva, es un instrumento solidario para profundizar y no eliminar. Aquello que no debería permitirse es el abuso que puede producirse cuando la organización sindical apela a terceros trabajadores para cumplir con sus obligaciones de un contrato sindical.
17- Tampoco es conveniente que la homologación de las competencias de los profesionales de la salud la desplacen de las sociedades científicas a monopolios estatales.