Por: Ruth Stella Catalina Muñoz Serrano/ El ser humano es imprescindible, único y lo confieso, muy difícil de entender, dispuesto a demostrar que puede con todo, no sé si es por la imagen adquirida de que todos somos Super man y que por mas grande que sea la situación “podemos con todo”, no se porque nos hemos autoengañado tanto, que hemos depositado nuestra percepción en expectativas generadas por lo que otros han soñado o incluso por lo que hemos vivido, pero que nos ha hecho daño, hemos estado viviendo en ese espejismo, que es una realidad entonces equivoca de la podríamos vivir.
Pero que, finalmente es la realidad que muchos vivimos.
Lo dicotómico, es que, teniendo familia, quisiéramos estar solos, o teniendo el cabello negro lo queremos de otro color, parece que nuestro nivel de inconformidad con el lugar, país, trabajo que tenemos es tan grande que olvidamos los momentos importantes que nos han producido una pizca de motivación. Nada nos llena, nos satisface, nada y aunque el vaso siempre este medio vacío.
¿Qué tan realizado te sientes?
El nivel de realización que sientas en tu vida, esta relacionado con el nivel de motivación en tu vida, pero no compares tu proceso con el de nadie más, porque justamente este es uno de los motivos por los que nos quedamos estancados comparándonos con el proceso del otro, deseando los bienes del otro y despreciando los que nos fue dado.
Esta es una de las mayores dicotomías del ser humano, que no comprendo ni como persona, ni como profesional, porque me llena de misterio y sorpresa reconocer como los diferentes puntos de vista hacen eco en la forma como nuestra sociedad se ha construido, donde puede reinar por un instante la paz y por otro, el desamor, que extraños somos.
Esa extrañeza pese a todo es la que construye nuestras individualidades y la que hace que, tengamos diversidad para ser y decidir, pero desde la conciencia que se requiere para esto, no llevado al extremo de solo velar por el interés individual, sino que desde esa construcción personal se pueda irradiar a los demás, dicho por Epictecto de otra manera “Trázate tal norma de vida que puedas seguirla lo mismo cuando estés solo que en compañía” que lo que seas para ti, sea lo que puedas mostrar al mundo, en tanto te sientas tan seguro de lo que eres.
Es mas fácil, creo yo, aunque la angustia y la ansiedad sean una realidad, tomar decisiones en torno a planear una vida concreta en cuanto este al alcance nuestro, que dejar que el viento se lleve todo y que en eso de “fluir” se nos escape la vida; es nuestra disposición, decidir avanzar y crecer, que quedarnos estancados, pero esa debe ser una visión propia, en la que con todo e indecisión, problemas y dicotomías propias del ser humano, se suelte el bulto de inseguridad que cargamos, a veces en vano, lo cargamos solo con orgullo.
No dejes que tu vida sea producto de la indecisión, aunque no conozcas tu futuro, arriésgate a construir, aunque no veas el norte, hazlo; sé dueño de tu vida.
…
*Docente, Psicóloga (UNAD), Especialista en Gerencia de Proyectos (Uniminuto), Maestrante en Psicología comunitaria (UNAD).
Facebook: RuthSCata
Twitter: PsiRuthSCata
Instagram: ruthscata