Argelia transita horas difíciles luego de que las altas temperaturas que se registraron el miércoles 17 de agosto abrieran una serie de incendios en el este del territorio, una situación que ya causó el fallecimiento de al menos 38 personas, 24 en un solo día, y 200 heridos.
En lo que va del mes, 161 focos se desataron y ya consumieron más de 3.200 hectáreas, según datos suministrados por el Ministerio del Interior.
Este jueves, los bomberos que estaban extinguiendo el fuego en el norte argelino calificaron el contexto como “escenas de desolación”.
La zona más delicada sucede en la provincia de El Tarf, lindante con la frontera con Túnez, donde 24 civiles perecieron el miércoles.
Por su parte, en Souk Ahras, 400 viviendas se quemaron, decenas de familias quedaron desplazadas y otras 45 terminaron heridas, dijo Protección Civil.
En tanto que Gendarmería Nacional comunicó la trágica muerte de ocho pasajeros que viajaban en un autobús cuando este quedó rodeado por las llamas en la carretera montañosa que conecta El Kala y Annaba.
Para repeler los incendios, el Alto Mando del Ejército movilizó equipos de extinción, 1.700 agentes de Protección Civil, 280 camiones cisterna y helicópteros.
Además, los gendarmes clausuraron varias carreteras nacionales.
Argel alquiló un hidroavión ruso Beriev BE-200, pero tras ser utilizado reiteradas veces padeció una avería y estará fuera de circulación hasta el próximo sábado, afirmó el responsable de la cartera de Interior, Kamel Beldjoud.
Compensaciones económicas a los afectados
La cuenta oficial de Twitter de la Presidencia emitió un mensaje donde asegura que Abdelmadjid Tebboune “ratifica la postura del Estado y su plena movilización para apagar los focos y atender a los heridos”.
“El presidente de la República extiende sus más sinceras condolencias a las familias de las víctimas, deseando una pronta recuperación a los heridos”, agrega.
El miércoles, el jefe de Estado advirtió que las familias de los fallecidos o quienes perdieron sus pertenencias “obtendrán una compensación”, aunque no dio mayores detalles.
Los inconvenientes con fuego no son una novedad en Argelia. El año pasado transitaron el más letal de su historia moderna, después de que 104 habitantes murieran -33 eran militares que integraban operaciones- y alrededor de 100.000 hectáreas fueran devastadas.
Desde ese momento, las autoridades impulsaron una iniciativa legislativa que condene a los autores de incendios voluntarios con hasta 30 años de prisión o cadena perpetua en caso de haber víctimas fatales.