Hace tres años en el centro educativo rural El Paulón, más de 200 estudiantes de primaria debían compartir los escasos equipos de cómputo existentes para sus clases de informática.
La realidad es otra en el intento de cerrar brechas tecnológicas, entregando nuevos equipos de cómputo.
“Los computadores que usábamos, tenían 10 o 15 años y estaban obsoletos”, recordó Edwin Jaimes, docente del grado tercero primaria. El educador comparte sus conocimientos en un salón de 25 estudiantes que utilizan igual número de equipos de cómputo nuevos.
Para apoyar los conocimientos de los menores, los computadores cuentan con contenidos educativos preinstalados que trabajan sin conectividad.
La directora del centro educativo rural, Paola Catalina Núñez destacó la importancia de la herramienta tecnológica en tiempos de pandemia y el papel que juega la tecnología en la actualidad. “En estos momentos nuestros estudiantes aprovechan el acceso al internet. Acceso con el que antes soñábamos”.
Como un complemento a la formación pedagógica, la institución escolar cuenta con una dotación importante de juegos Lego (kits para distintas edades en los grados de cero a último grado de primaria) para potenciar el desarrollo de los estudiantes.
“La educación pública y de calidad es prioridad para nuestros niños y no podemos permitir que la corrupción se robe sus oportunidades”, dijo Juan Carlos Cárdenas, alcalde de la capital santandereana, sin más detalles.