El papa Francisco, presenta “un cuadro clínico complejo”, anunció hoy lunes el Vaticano, dando a entender que la hospitalización del pontífice de 88 años se prolongaría.
“Los resultados de los exámenes efectuados estos últimos días y hoy mostraron una infección polimicrobiana de las vías respiratorias que llevó a una nueva modificación de la terapia”, indicó este boletín sobre su salud.
Hasta el momento, todas las pruebas médicas han señalado la necesidad de un monitoreo continuo y un ajuste terapéutico acorde con su evolución. Ante este diagnóstico, los especialistas que están tratando al Santo Padre en el hospital Policlínico Gemelli de Roma donde permanece ingresado desde el viernes han decidido modificar su tratamiento para abordar de manera más efectiva la “compleja condición clínica” del Pontífice.
Según informó el Vaticano, el estado de salud del Santo Padre requiere una hospitalización prolongada para asegurar su recuperación. La Oficina de Prensa de la Santa Sede ha informado que la Audiencia General del próximo miércoles ha sido cancelada, por lo que la hospitalización se prolongará al menos hasta el 19 de febrero.
Sin embargo, aunque el Papa Francisco ha suspendido su agenda, ha continuado con algunas de sus actividades habituales, como, por ejemplo, sus llamadas diarias a la parroquia de la Sagrada Familia en Gaza para expresar su cercanía con la comunidad cristiana e informarse sobre la situación de los fieles en la región.