El alcalde de Palmas del Socorro, Jorge Caballero Rodríguez, nominado en Los Más Influyentes 2024 en la categoría de Mejor Alcalde de Municipios Básicos de Santander, primero fue sacerdote que alcalde. En 1990 su motivación le decide ingresar al Seminario Mayor de San Gil para recibir su formación hacia la vida sacerdotal ministerial. Allí estudió las ciencias de la filosofía y la teología; conociendo ahí mismo al movimiento de los focolares, con quienes viajó a Italia a continuar su formación académica y comunitaria a finales de 1993 hasta principios de 1995. Al regresar a Colombia realizó un año de práctica pastoral centrada en el trabajo con la juventud, para luego finalizar sus estudios académicos y así ser ordenado como sacerdote el 30 de noviembre de 1998.
Jorge Caballero manifiesta que “siempre he sido una persona decidida y optimista en mis compromisos académicos, personales y laborales. En el año 2013 regresé al viejo continente para continuar mi crecimiento intelectual y mi formación humana, realizando un estudio interdisciplinario entre filosofía y teología, para obtener una maestría en cultura de la unidad con especialización en ontología trinitaria en el Instituto universitario Sofía de Italia”.
El hoy alcalde de Palmas del Socorro nació en Aratoca – Santander; hijo de Pedro Antonio Caballero y Rosa Victoria Rodríguez. Es el noveno de 12 hermanos. Su familia permaneció anclada geográficamente sobre el cañón del Chicamocha durante toda su niñez, radicada bajo principios y valores humanos iluminados bajo la dirección divina. Sus padres de ascendencia campesina se esforzaron por dar lo mejor de modo que fuera alguien en la vida como siempre se lo inculcaba el papá. Sus hermanos batallan cada uno con independencia sacando adelante sus compromisos de hogar y trabajo. No ha tenido núcleo familiar en primer grado debido a su compromiso ejercido como sacerdote católico antes de llegar a ser elegido alcalde. Por ello no tiene esposa ni hijos.
Contó además que sus estudios de primaria los realizó en las veredas de San Miguel y Cantabara, sector La Palma, en Aratoca; secundaria la realizó en el colegio San Luis, alternando su tiempo entre el deporte y emprendimientos personales, para después terminar su bachillerato en el colegio conciliar San Carlos de San Gil, en donde fue perfilando en su vocación y misión se servicio y de trabajo con comunidades.
Su experiencia laboral o de trabajo siempre con comunidades, llámese pueblo, colegio, Seminario Mayor, barrio, Roma, Incisa (Italia), Ciudad Bolívar (Bogotá). Allí forjó gran parte de un liderazgo con carácter y de compromiso con las distintas comunidades. Su primer municipio de trabajo pastoral fue Onzaga, pasando después por San Gil, Socorro, Palmas del Socorro, Suaita, Bogotá, Italia y Pinchote, entre otros.
Comentó Jorge Rodríguez que en sus estudios, sus reflexiones personales, sus diálogos con lo divino y en sus compromisos de trabajo, “siempre le he pedido a mi Ser Absoluto que me ponga en el lugar de la barca a remar dónde Él vea que le puedo servir mejor. De esta manera, he estado dispuesto a estar y a actuar no donde yo mismo crea conveniente, sino donde Dios crea que sea más conveniente”.

Manifestó que nunca trabaja esperando reconocimientos, pues estos llegan en la medida en que se ha esforzado por hacer las cosas correctamente por el camino del bien. Comenta que su mayor reconocimiento lo ha recibido de las comunidades y gentes sencillas por donde ha pasado cumpliendo con cada misión que se le ha asignado. Expresa que quiere ganar el reconocimiento del buen uso y administración de los recursos públicos, sin despilfarrar en
inversiones poco útiles a la sociedad, porque la honestidad y lealtad están por encima de cualquier interés personal.
Al haber sido incluido en el grupo de alcaldes nominados, considera el alcalde de Palmas del Socorro que “este premio, se debe, por un lado, al gran valor de la responsabilidad asumida desde el primer momento que fui elegido por voto popular como alcalde para el periodo 2024-2027 y, unido a ello está la experiencia de más de 30 años de trabajo social y comunitario con las distintas gentes por donde he pasado durante mi vida, ya sea como seminarista y después como sacerdote católico. De igual manera, mi perfil del bien común, le ha sumado, junto a la honestidad y la verdad al decir las cosas, para estar en este grupo selecto. También, el buen uso de la política sin promesas falsas ha sido fundamental para avanzar en mis objetivos propuestos como administrador público que ha pasado a ser desde el 1 de enero de 2024”.
Por otra parte, aprovechó el alcalde Jorge, “a decirle a la juventud y demás personas que empiezan a salir a la vida pública, que se esfuercen por ser ustedes mismos, trazándose metas objetivas que puedan cumplir como fruto del esfuerzo, la constancia y la lealtad a ustedes mismos, la honestidad, la verdad y el cumplimiento del derecho y la justicia. No busquen ser copia de lo que otras personas son; sean ustedes mismos, porque el examen de la vida es exigente y cada persona tiene un examen de vida diferente; así no perdemos nuestra esencia, sino que la marcamos cada día, dejando huellas positivas y constructivas por donde pasamos. Siempre hay que ir adelante sin desmayar ante la dificultad y obstáculos que vamos encontrando en el camino de la vida”.
Ahora bien, expresa el alcalde, “me surge una pregunta útil especialmente a la juventud y a muchas personas emprendedoras que día a día luchan por tener un mejor bienestar: ¿qué hacer para lograr los objetivos propuestos en la vida? (Llámese estudio, deporte, trabajo, familia, empresa, entre otros). Al responder este interrogante se hace necesario recordar una palabra muy amplia y esquiva para un alto porcentaje de la sociedad y, es el valor del sacrificio, ya que para alcanzar metas y buenos logros, se hace necesario posponer y priorizar algunos quehaceres y compromisos secundarios, lo cual aparentemente es fascinante pero al mismo tiempo no construyen el talante o el tipo del ser humano que realmente aporta a la construcción de una sociedad más justa y prospera en todas las dimensiones de la vida. De mi parte -comenta el alcalde Jorge- a mí el deporte me ha fascinado desde muy joven y para ello tenía que sacrificar ciertos gustos y programas de los
jóvenes, como, por ejemplo: trasnochar, tomar licor, entre otros, pues yo leía y me informaba acerca de las consecuencias negativas que eso traía para un mejor rendimiento deportivo. Y, así como este ejemplo hay otros, experiencias de la vida que nos ayudan a ponernos retos para ascender cada día hacia la cima del éxito y la buena calidad de vida”.
“Para finalizar -dijo el alcalde Jorge- quiero recordar la importancia de la constancia, la perseverancia, el sacrificio, la entrega desinteresada, la disciplina y el gusto por lo que se hace en la vida; ya que si no emprendemos los retos con libertad interior, manifestados externamente con una mirada serena y una sonrisa de buen tacto por lo que se hace, poco se podrá avanzar con certeza hacia el puerto donde nos espera esta sociedad sediente de un bien común equitativo y con oportunidades hacia todos”