Por: Beatriz E. Mantilla/ Colombia bajó 35 lugares en el ranking de los países a los cuales los extranjeros desean trasladarse a vivir o trabajar. Así lo confirmó un reciente estudio de las firmas Boston Consulting Group (BCG) y The Network, dos firmas de consultoría globales, quienes realizaron una encuesta en 190 países que buscaba determinar a qué lugares las personas prefieren irse a vivir por cuestiones personales o laborales.
El estudio se denomina ‘Decoding Global Talent, Onsite and Virtual’ (en español ‘Decodificando el talento global in situ o virtual) y contó con la participación de 209 mil extranjeros en diversas latitudes del planeta, en quienes se identificó una tendencia de cambio de percepción de preferencia para vivir originada en el manejo de la salud pública y en tiempo de post pandemia.
Del puesto 36 Colombia descendió al 71 en el ranking. ¿La razón? La proyección de crecimiento profesional en el país es reducida y cada vez más restringida; el manejo de la pandemia y la situación de reactivación económica post – Covid; fueron algunas de sus principales consideraciones.
Es así como el contar con menores condiciones tanto de ingresos como de calidad de vida, los bajos salarios, garantías y seguridad laboral, así como el rezago en materia de infraestructura tecnológica y ciencia, también fueron parte de las variables que valoraron los extranjeros.
Los resultados de dicho estudio ratifican la amplía percepción que a diario se refleja en los medios de información, en los cuales los entrevistados manifiestan preocupación por el desempleo, la inseguridad, congestión de las ciudades, los bajos sueldos y falta de garantías laborales, inflación, la influencia de las llamadas “palancas”, apellidos tradicionales, para acceder a mejores cargos; el mal trato en las relaciones laborales, la carencia hasta de insumos para realizar sus tareas diarias; la falta de infraestructura y logística básica para cumplir con sus metas institucionales; y con todo ello la cada vez más distante posibilidad de tener una vida laboral y un retiro pensional dignos.
A lo anterior se sumó el bajo comportamiento de la economía que afronta una de las recuperaciones más lentas de la zona al compararse con otros países latinoamericanos. En este punto es preciso recordar que países como Brasil, Ecuador, Perú, Costa Rica, México, entre otros, lograron iniciar vacunación de forma temprana y Colombia fue uno de los últimos; así como la cifra de decesos por Covid-19.
La investigación identificó que el histórico paradigma del ‘sueño americano’ como país preferido para conocer Estados Unidos como destino principal, ya no está vigente.
Los participantes valoraron de manera positiva los países que dieron un mejor manejo a la sindemia (una situación en la que «dos o más enfermedades interactúan de forma tal que causan un daño mayor que la mera suma de estas dos enfermedades»); y por ello las personas se inclinaron por los países que tienen un menor número de casos de Covid-19.
Es así como la variación en los últimos seis años del primer puesto, por citar un caso, fue la siguiente: en 2014 y 2018 Estados Unidos encabezaba la lista, ahora lo hace Canadá. La mayoría de los países que ocuparon los primeros lugares se caracterizan por tener una incidencia baja de casos de Covid-19, entre ellos, Canadá, Australia y Japón. Igualmente, Singapur y Nueva Zelanda se ubicaron en el top 10; los países de Asia y Pacífico se distinguieron por su gestión en materia de salud pública.
El listado generado por BCG y The Network se ha convertido con el paso de los años en el referente que analizan quienes sueñan con vivir la experiencia de trabajar fuera del país origen y en general, en un escalafón útil para tomar decisiones de movilidad internacional.
Caída de Colombia
Respecto a los países vecinos, en el caso de América Latina, le siguen Chile (puesto 85) y Perú (puesto 113), mientras que Argentina ocupa la posición 43 y sobresale entre los países de la región.
Sin embargo, los efectos de percepción de seguridad y deseo de migrar del país fueron más allá, el estudio “Decoding Global Talent, Onsite and Virtual” también reveló un impacto significativo en las preferencias de las personas con respecto al trabajo en el exterior: en primer lugar, redujo el interés en moverse a otro país, prefiriendo trabajar con compañías extranjeras en su país de origen; y, en segundo lugar, valorando de manera positiva la responsabilidad que han asumido los diferentes Estados para inclinarse hacia aquellos países que mejor gestión dieron a la emergencia sanitaria por el coronavirus, que iniciaron vacunación temprana, que han tenido menos casos y en donde se percibe menor corrupción en el tema.
Adicionalmente, las medidas restrictivas de inmigración redujeron el interés de reubicación laboral, como parte de las nuevas limitantes originadas por el coronavirus y las diversas políticas extranjeras y la, ahora más creciente, alternativa del teletrabajo.
Ahora bien, con ese escenario creciente de intención de ‘movilidad internacional remota’ post – pandemia bien vale la pena reflexionar y poner en acción, para el caso santandereano, estrategias que faciliten fortalecer la atención y satisfacción del cliente como una oportunidad de mejora y factor clave de éxito, dado que si bien se ha invertido en infraestructura resulta pertinente enriquecer dichas competencias de atención y relaciones interculturales.
También es preciso destacar, que esa modalidad de empleo internacional remoto plantea nuevos desafíos para las empresas en todo, en su estilo de liderazgo, estructura para toma de decisiones, relaciones interpersonales y gestión de la comunicación interna, en la integración cultural y la obtención de visas; sin embargo todo ello puede ser una oportunidad para que más trabajadores adquieran la experiencia internacional sin necesidad de irse de casa y mientras tanto territorio como el nuestro logre fortalecer y mejorar sus indicadores de atención y satisfacción del cliente.
La tendencia también indica, que una vez existan mejores condiciones de seguridad para movilizarse, dichos desplazamientos se realizarán quizá más por turismo que por trabajo y en ese momento histórico, la apropiación de competencias de expresión en otros idiomas, así como de interculturalidad e inclusión de población diversa en la dinámica laboral, generará oportunidades de mejora en el camino del fortalecimiento hacia la prestación de servicios turísticos de calidad en el territorio.
*Comunicadora Social organizacional y periodista; docente universitaria y consultora en asuntos corporativos y de Responsabilidad Social Empresarial.