Por: Luis Carlos Heredia Ordóñez/ En Colombia no se puede seguir avalando los discursos románticos y delincuenciales del “ambientalismo y el activismo ambiental”, que ha estado basado en la ignorancia, y sobre todo, justificando los graves daños ambientales que han causado las especies introducidas en nuestro país.
Según varios autores los impactos generados sobre los efectos invasivos de los organismos antecedido la destrucción de especies nativas, que son muy importantes para el desarrollo de las economías nativas, especialmente en nuestro país la destrucción de la economía del Magdalena Medio; se ha visto afectada especialmente por la introducción de especies que han destruido la diversidad ictiológica o la diversidad de los peces, qué es tan importante para la cultura pesquera ribereña.
Los efectos concomitantes en la genética de las poblaciones originales que se afectan por las especies introducidas, como es el caso de la introducción de hipopótamos El río Magdalena, ha derivado en la afectación de las dietas, los hábitats y la calidad del agua.
Elementos que son importante para especies como el bocachico y el bagre, especies que han criado a generaciones de pescadores y que han aportado al desarrollo de una región tan importante como el Magdalena Medio.
Por eso la decisión de un proceso legal en contra de los hipopótamos, que en la década de los 80 de manera irresponsable y demostrando la corrupción en esa época del instituto de recursos naturales (Inderena) favofreció al capo de la droga, Pablo Escobar; es una decisión que es totalmente aceptada y acertada por parte del Ministerio de Medio Ambiente y Desarrollo Sostenible, que ha demostrado el carácter que requiere una autoridad ambiental para acabar con los problemas ambientales del país a pesar de demorarse casi 40 años y resistir los ataques infames y de chantaje de animalistas fundamentalistas y de ecologistas saboteadores sin formación y argumentos técnicos en estos temas.
Ojalá que con la misma vehemencia y eficiencia que se ha trabajado en exterminar a esta especie introducida, también se haga con vehemencia, además con eficiencia; la exigencia de parámetros ambientales a industrias que dejan olorosas y desagradables impactos ambientales, por la falta de una gestión ambiental eficiente y de aplicación de la ingeniería ambiental es un proceso como pasa por ejemplo: en el sector de la producción de harina y concentrados en el área metropolitana de Bucaramanga.
Por eso, la eliminación de estos hipopótamos y su sacrificio o cacería es fundamental para acabar con los riesgos ambientales y de seguridad, para garantizar a los ciudadanos colombianos su derecho constitucional a un medio ambiente sano y sin riesgos ambientales, asimismo para hacer cumplir los parámetros de calidad de agua; que estas especies introducidas afectan y que destruyen los ecosistemas de especies importantes desde la economía de las regiones,
Además, es urgente controlar a una especie altamente agresiva, qué afectado la calidad de vida de los ciudadanos, además de ser un triste recuerdo de como la mafia y la delincuencia junto con la corrupción fueron durante la década de los 70 y los 80, el común denominador de una generación denominada los mágicos, en donde delincuentes, cómo Pablo Escobar, Gonzalo Rodríguez Gacha, y los hermanos Ochoa, quienes mostraban su éxito económico basado en el tráfico ilegal de droga, con este tipo de lujos y de excentricidades qué afectaron no solo la sociedad sino al medio ambiente de manera severa como ha pasado con los hipopótamos y los peces en Puerto Triunfo.
Sacrificar los hipopótamos de Pablo Escobar, para evitar un desastre ecológico es una necesidad fundamental para la protección a la soberanía del país en temas ambientales, qué debe ser replicado solamente en el control de especies introducidas en Colombia, también debe ser una clara señal para exigir por parte de los ciudadanos de una manera exigente eficiente y eficaz resultados en la gestión qué hacen las autoridades ambientales.
Por eso estimado lector: los ciudadanos debemos ser críticos, exigentes, diligentes en usar las herramientas que nos brinda el estado desde la ley, para exigir resultados a funcionarios públicos que pagamos con los altos costos de la sobretasa ambiental, para que el dinero público no se dilapide en soluciones inútiles y politiquería de las autoridades ambientales en el país.
Es con hechos y resultados que se solucionan los problemas ambientales en el país, no es con canciones pegajosas y dibujos animados, que se hace una gestión ambiental eficaz que garantice la sostenibilidad ambiental y económica de nuestro país.
…
Tecnólogo ambiental, ingeniero ambiental.
Facebook: Luis Carlos Heredia
Celular: 3154197438
Twitter: @LUISKHeredia