En muchos lugares del país, es común consumir carne de animales silvestres como la iguana, la tortuga o el armadillo, lo que contribuye al comercio ilegal de especies y pone en riesgo la biodiversidad del país.
Por: Luis Carlos Heredia Ordóñez/ La Semana Santa es una de las festividades religiosas más importantes en Colombia, donde millones de personas se reúnen para celebrar la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
Sin embargo, durante los últimos años, se ha registrado un aumento en el tráfico ilegal de especies durante esta época del año, lo que ha tenido graves consecuencias en el medio ambiente y en la biodiversidad del país.
Resulta preocupante el impacto que el tráfico ilegal de especies tiene en el medio ambiente. El comercio de animales vivos para ser utilizados en la celebración de la Semana Santa es una práctica inhumana que no solo atenta contra los derechos de los animales, sino que también amenaza la biodiversidad del país.
Es importante tener en cuenta que muchas de estas especies son endémicas de Colombia y están en peligro de extinción, lo que hace que su captura y venta sea aún más alarmante.
Durante la Semana Santa, Colombia recibe una gran cantidad de turistas nacionales e internacionales, lo que genera un aumento en la emisión de gases de efecto invernadero, la generación de residuos sólidos y la contaminación del agua.
Además, el turismo masivo también tiene un impacto negativo en la fauna, ya que la construcción de infraestructuras turísticas, el ruido y la presencia humana pueden alterar el hábitat natural de muchas especies.
Por otro lado, la Semana Santa también es una oportunidad para promover la educación ambiental y el turismo sostenible. Es importante que las autoridades locales y las empresas turísticas fomenten prácticas responsables, como la gestión adecuada de residuos, el uso eficiente de la energía y el agua, y la promoción de la conservación de la fauna y el medio ambiente.
El tráfico ilegal de especies es una actividad ilícita que amenaza la biodiversidad y el equilibrio ecológico de los ecosistemas. En Colombia, se trafican especies como iguanas, loros, tucanes, boas, entre otros, para satisfacer el mercado de mascotas exóticas, la medicina tradicional o la gastronomía.
Esta actividad ilegal según el código penal y el código de policía, tiene un impacto directo en la fauna y el medio ambiente, ya que afecta el equilibrio ecológico de los ecosistemas, reduce la diversidad siendo uno de los aspectos más preocupantes del tráfico ilegal de especies durante la Semana Santa en Colombia debido a la demanda de animales para ser utilizados en la comida tradicional de esta época del año.
En muchos lugares del país, es común consumir carne de animales silvestres como la iguana, la tortuga o el armadillo, lo que contribuye al comercio ilegal de especies y pone en riesgo la biodiversidad del país.
Además, es importante destacar que consumir carne de animales silvestres puede tener graves consecuencias para la salud de las personas. Estas especies pueden contener parásitos y enfermedades que pueden ser transmitidas a los seres humanos, lo que representa un riesgo para la salud pública.
También es importante tener en cuenta que muchas de estas especies están en peligro de extinción y su consumo puede contribuir a su desaparición. La caza y la captura indiscriminada de animales silvestres para ser utilizados en la comida de Semana Santa es una práctica que va en contra de la conservación de la biodiversidad y puede tener graves consecuencias en el ecosistema.
Es necesario promover prácticas más sostenibles y responsables en la alimentación durante la Semana Santa. En lugar de consumir carne de animales silvestres, se pueden utilizar alternativas más sostenibles y saludables, como pescados de cultivo o vegetales.
También se pueden promover prácticas de consumo responsable, donde se busca consumir alimentos que no contribuyan al tráfico ilegal de especies y que sean producidos de manera sostenible. Ética de las especies y puede provocar la extinción de muchas especies.
Desde la perspectiva de la crítica a la explotación de fauna, el tráfico ilegal de especies es una actividad cruel que causa sufrimiento a los animales y puede ser considerada como una forma de esclavitud animal. Además, esta actividad ilegal también tiene un impacto negativo en la economía y el desarrollo sostenible del país, ya que puede afectar el turismo y la reputación de Colombia como un destino turístico responsable y sostenible.
En conclusión, el tráfico ilegal de especies durante la Semana Santa en Colombia es una práctica inhumana que a practica por cualquier ciudadano, desdibuja el quehacer del cristiano frente al cuidado del medio ambiente y que amenaza la biodiversidad del país y tiene graves consecuencias en el medio ambiente.
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*Tecnólogo ambiental, ingeniero ambiental.
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