Este inicio del 2023 se podrían presentar mayores incrementos en los alimentos que se transportan desde el departamento del Nariño.
La temporada de lluvias en el país no da tregua, las fuertes precipitaciones han provocado no solo desbordamientos de algunas afluentes sino derrumbes que bloquean las vías de acceso, tal como lo sucedido en la vía Panamericana, a la altura del municipio de Rosas, en Cauca, que dejan hasta el momento alrededor de 700 personas damnificadas.
Hace más de una semana en este sector la tierra se desprendió generando grandes bloqueos en el corredor principal que comunica al departamento de Nariño con el centro del país y dejándolo incomunicado. El combustible y el gas están escasos, los alimentos suben de precio y comienza el desabastecimiento al interior del departamento y amenaza con expandirse a otras zonas del país.
Aunque el Gobierno Nacional le ha hecho frente a esta situación y ha puesto sus esfuerzos en reubicar a los damnificados y tratar de remover los bloqueos,los transportadores siguen detenidos y los productos no han podido emprender su camino para abastecer las zonas aledañas.
Aunque el centro del país aún no se ha visto afectado, los agricultores advierten que, teniendo en cuenta que esta temporada del año es la principal de la cosecha de algunos alimentos, la demanda podría descender y esto alzaría los precios en otros sectores.
La papa, la arveja, la cebolla, la caña panelera, el coco, tomate, maíz, zanahoria, entre otros alimentos de la canasta familiar podrían sentir próximamente los efectos derivados de las pérdidas de los agricultores, lo que se traduciría en mayores presiones que se suman al aumento del 13.1% del IPC anual reportado en el último informe del Dane.