En medio del debate de control político sobre la construcción del megacolegio integrado Lucas Caballero en el municipio de Suaita (Santander), un debate citado por los diputados Luis Ferley Sierra Jaimes y Giovanni Heraldo Leal Ruiz, del partido Alianza Verde, se desarrolló un acalorado contrapunteo entre el alcalde de la localidad, Elkin Javier Chacón Sanabria y ‘el profe’ Ferley.
Luego de agradecer a la gente por asistir al debate, sesión descentralizada de la Asamblea de Santander, en donde se plantearon las propuestas de la ciudadanía con relación a lo que opinaba sobre la inversión de 16.400 millones de pesos en la construcción del nuevo Colegio Integrado Lucas Caballero, el mandatario local tuvo un asistente directo a quien se dirigió.
Dijo el alcalde que “…y algo que me parece más ofensivo aún que un profesor, que un maestro, esté en contra de que se lleven los recursos a un municipio como Suaita».
Cuestiono que, «¿nosotros por ser un municipio de sexta categoría no nos lo merecemos? En San Gil, Bucaramanga o en Bucaramanga en el barrio Estoraques, donde estoy seguro ha llevado grandes inversiones. A mí como alcalde me eligieron para traer recursos a nuestro municipio”.
Dijo también que, “agradecimientos a la secretaria de Educación, María Eugenia Triana, a la secretaría de Infraestructura, al Gobernador quien tuvo la voluntad política de darnos los recursos, una voluntad política que nunca nadie la había tenido con Suaita. Más de 25 mil millones que nos ha asignado la Gobernación a nuestro municipio”.
¡El pueblo suaitano se respeta!»
Pero la situación no quedó allí. De hecho, la sesión descentralizada se calentó aún más.
Enseguida el alcalde se dirige al diputado Luis Ferley Sierra Jaimes, “y no podría dejar pasar esta oportunidad, como primera autoridad del municipio de Suaita, de decirle al diputado Ferley que le pida disculpas al pueblo suaitano, … el pueblo suaitano se respeta, el pueblo suaitano no se humilla”, frente al manoteo de alcalde en medio de su intervención y el diputado Sierra Jaimes quien responde, en donde se dicen varias cosas, pero que las barras no dejan escuchar.
El diputado Giovanni Leal toma el micrófono, se levanta e interviene, pide “tranquilidad, por favor”, le dice al presidente de la Asamblea Departamental, Mauricio Mejía Abello, “¡presidente tome las cartas en el asunto!”.
Pero la respuesta del diputado Mejía es airada. Se levanta y le rapa el micrófono a Leal y muy enardecido levanta la mano pidiendo calma. “Por favor. Por favor”. Y luego se gira a su derecha para dirigirse al diputado Leal. Se cruzan varias palabras que no se entienden.
Luego, el diputado Ferley Sierra se levanta y pide calma tanto a Mejía como a Leal. Mientras el alcalde se dirige al público “muchas gracias” y se despide.
Festival de ataques
El presidente de la Asamblea, Mauricio Mejía toma el micrófono y muy enardecido le dice a colega Leal, “si quiere hablar, pida la palabra, no es raparme el micrófono, ¿por qué me va rapando el micrófono?”.
De hecho, entre ambos vuelven a cruzar palabras que no se entienden. El diputado Sierra trata de calmarlos. Y luego de unos segundos de calma, Mejía -tal como lo establece el reglamento de la Duma- le concede la palabra a Leal.
El diputado Leal dice: “lo primero es que quiero pedirles disculpas por lo que está pasando, tranquilos todos”.
Mientras tanto el diputado Hugo Cardozo se sienta en donde estaba el alcalde Chacón y lo deja de pie. Luego se da cuenta y se levanta. El mandatario suaitano vuelve y ocupa su lugar al lado del presidente de la Asamblea, Mauricio Mejía.
Leal sigue su intervención: “les hago un llamado a la tranquilidad. Esto no es de peleas, es de argumentos, no es de posiciones. Así que por favor quiero pedirles que se calmen. Me parece un irrespeto con nosotros, los diputados, la propuesta de respetarnos… y del señor Alcalde”.
Pide unos argumentos y unas cifras “¿dónde están?”, dice Leal. Sus solicitudes, de las cuales no se entiende lo que dice, alteran más al público presente. Leal dice “presidente, no quiere intervenir más, porque aquí ya no hay que hacerle”. El presidente Mejía toma el micrófono y anuncia la intervención del diputado Sierra.
«No voy a pedir disculpas»
Dice el diputado Ferley Sierra, quien fue mencionado por el alcalde, “gracias presidente. Lo que esperaba era argumentos según la iniciativa que ustedes mismos hicieron. Primero que todo calmémonos”, dice, porque la algarabía del público continúa.
Sierra cambia de micrófono porque sospecha que no se le está oyendo. Cambia de micrófono, pero el audio no es muy comprensibles, dice, entre, lo que se le entiende, que “quiero que se me diga en qué momento dije yo que no quería el colegio. Yo no lo dije. Calmémonos, calmémonos. Yo me referí a una persona que está condenada. Pero no me referí al tema de…”. Interviene una persona y le pide al diputado Sierra, que se refiera al tema del debate y no a otros temas que no competen con el colegio.
“Uno no tiene que disculparse cuando no ha hecho nada malo”… continúa hablando pero no se entiende lo que dice.
Sin embargo, en un momento dado, mientras ‘el profe’ Ferley sigue hablando de las disculpas que no va a pedir, el alcalde suaitano se levanta y extiende la mano al diputado en son de paz. Sierra le da la mano y el alcalde agita en varias ocasiones el apretón de manos y vuelve a sentarse.
Sierra continúa hablando: “nuestro trabajo y eso es lo que quiero que entendamos. Nuestro trabajo de hoy es el control político y para eso estamos para hacer ese control político”.
Tras ese agarrón, continúa la sesión que alcanzó a durar, según la transmisión cinco horas 24 minutos y 13 segundos.