Por: Luis Eduardo Jaimes Bautista/ ¿Cómo se utilizan los dineros públicos en los millonarios contratos que favorecen la política comarcana, y sobre todo aquellos que van a los servicios prioritarios…? Acueductos, alcantarillados, vías en los diferentes municipios del departamento de Santander? La gallinita de los huevos de oro para alcanzar escaños en el congreso o corporaciones de elección popular.
Quienes aspiraron o han sido elegidos, en este periodo constitucional 2018-2022, muchos están investigados por los organismos de control. Pasa el tiempo y no pase nada, porque su función, supuestamente es la de protegerlos; como ellos se deben al devenir político, les corresponde estar en la empresa política para hacerse ricos de la noche a la mañana.
¿Para qué ha servido el Estatuto anticorrupción, ley antitrámites, ley antisobornos y la ley 1757 de 2015, que será votada este 26 de agosto sobre esa lucha contra la corrupción que se ha comido a medio país y seguimos sin control judicial para condenar a quienes ha robado a manos llenas y construyen mansiones por 5 mil o 10 mil millones de pesos, dineros en paraísos fiscales en otros países?
Hago esta introducción, para mostrar el Icebergs de muchos contratos que se hicieron en cuatro administraciones en Santander, desde el Coronel (r) Hugo Eliodoro Aguilar (Investigado); Horacio Serpa Uribe, (Quien como buen capoteador de las investigaciones, desde Ernesto Samper y los dineros de los narcos no pasó nada): Richard Aguilar Villa y los siete planes estratégicos para el desarrollo, contemplado en el contrato plan Santander por 7.8 billones en inversión para el departamento, que le valieron supuestamente para hoy ser Senador.
La obligación de un periodista es investigar e informar los comportamientos de estos personajes públicos a quienes el pueblo les confía con su voto el manejo de la cosa pública, honesta y de servicio y no de intereses personales y proteccionistas como lo hacen a quienes nombra para que manejen las entidades públicas.
Traigo a colación, lo que está sucediendo en el Departamento de Santander con los Acueductos, vías, alcantarillados, en este sentido uno especial, el Acueducto del Municipio de Vélez y del Municipio Barichara, monumento nacional, quien padece del sagrado líquido cuando hay sequías.
El primero colapsó porque la represa Batanera fue construida con pésimos materiales, y que tuvo un costo de 6 mil millones de pesos, hoy este municipio no cuenta con agua, con investigación en la Procuraduría, por un contrato desde el año 2011. Gracias a los manejos y pliego de cargos que tiene el exgerente de la Empresa de Servicios Públicos de Santander, Esant. Igual situación la vive Barichara, quien hace siete años firmó un contrato en el 2011 para la construcción del acueducto por valor de 9 mil 540 millones de pesos, con un anticipo de 3 mil 800 millones, con ejecución cero. El nombre del ejecutivo de cuello blanco, el señor Edwin Ballesteros, colocado en la Gerencia de la Empresa, creada por el exgobernador Richard Aguilar, para su pupilo que militó en Opción Ciudadana, hoy elegido a la Cámara de Representantes por el Centro Democrático. ¿Se imaginarán de dónde salió el dinero para la campaña?
Las denuncias están en la Procuraduría, la Fiscalía y la Contraloría de Santander como riesgo de daño al patrimonio del departamento, interpuestas antes de las elecciones parlamentarias, sin que se conozca un pronunciamiento a estos hechos presuntamente graves. Igualmente los medios escritos de la región tienen reseñados estas investigaciones contra el Parlamentario, sin conocerse un resultado de las investigaciones. La Esant tiene muchos guardados que los organismos de Control deben buscar, ejemplo para mostrar a la opinión pública.
Twitter: @LuisEduardoJB1