Por: John Jairo Claro Arévalo/ El principio de Peter, que fue publicado en 1969, es un libro de autoría del profesor canadiense de Educación Laurence J. Peter y el escritor Raymond Hull, quienes afirmaron que «en una jerarquía, todo empleado tiende a ascender hasta su nivel de incompetencia», esto generó gran controversia en su momento, que años más tarde la Universidad de Yale de Estados Unidos, una de las más prestigiosas del mundo académico, en cabeza de la profesora de finanzas Kelly Shue en una investigación realizada, concluyó que lo manifestado en el principio de Peter, sus premisas se cumplen.
Aunque inicialmente se aplicó al mundo empresarial, hoy, esas premisas también cobijan al universo de la política. Este principio busca hallar las respuestas de por qué hay tantas personas incompetentes en cargos directivos.
Tanto en lo privado como en lo público hay políticas de ascenso para motivar a sus empleados o sus dirigentes, para los primeros la experiencia, el buen desempeño laboral, la eficiencia, la eficacia, la responsabilidad, la disciplina, etc., suelen ser los tópicos a tener en cuenta para un ascenso laboral, para los segundos, en lo público, el rigor es el mismo, pero con otro lenguaje, se esgrime la honestidad, la transparencia, la moral, la lealtad, honradez, integridad, entre otros adjetivos “benévolos y esperanzadores”.
Llama la atención que todos los políticos tienen en su discurso la diafanidad, el no robar, el no mentir como sus banderas principales, cuando todo esto no debería mencionarse porque es el deber ser de todo ciudadano ser honesto, transparente, limpio, sin embargo, como se presume que todos carecemos de esas principios y valores, “premiamos” con nuestro voto al que se muestre recto, impoluto, intachable.
Hemos llegado a tal punto de la sub valoración de lo debido, lo bueno, lo atinado, lo que debe ser, que cualquier ciudadano que se encuentre un bolso con cierta suma de dinero adentro y decide ir a las autoridades a devolver dicho bolso, claro, con el dinero, seguramente, ese ciudadano es noticia nacional y lo muestran como símbolo de honestidad, dando un mensaje equívoco, en la presunción de que la gran mayoría no lo hubiese devuelto.
Pero volviendo al tema del principio de Peter, hoy día muchas empresas privadas tienen como política este principio para acertar en el ascenso laboral de sus empleados, para ello escudriñan sus aptitudes gerenciales y el liderazgo de sus empleados y así evitar decepciones y descalabros para la empresa.
Para el caso de lo público, gobernar es gerenciar una empresa macro del estado llamada país, departamento y municipio; y recae en el poder ejecutivo y legislativo esa responsabilidad, en primer orden, el presidente de la república, los gobernadores y alcaldes como ordenadores del gasto, son los que tienen, como se dice en el argot político, la chequera o manejan el lapicero, en segundo orden le corresponde al congreso, las asambleas departamentales y los concejos municipales ejercer el control político porque son la junta directiva del poder ejecutivo y su función más importante, entre otras que tienen, es vigilar, auditar, controlar que el presidente, los gobernadores y los alcaldes ejecuten los presupuestos con austeridad eficacia y eficiencia.
Hoy vemos una mezcla de generaciones en el ejercicio de la política activa, que fueron elegidos hasta hace sólo dos años, muchos veteranos y algunos novatos, que son el reflejo del principio de Peter que dice que “mientras una persona es cada año más incompetente, ella misma se ve cada año más competente»,
Sólo nombraré algunas figuras de la política nacional, regional y local, porque tendría que escribir muchos libros del tamaño del libro gordo de “Petete”, enciclopedia de ocho tomos de cuatrocientas páginas cada uno, para mencionarlos a todos. Empiezo con el presidente Duque quien su amigo el “ñeñe” Hernández contribuyó a su campaña presidencial y fue asesinado en Brasil en extrañas circunstancias, sus “negocios” estuvieron ligados al narcotraficante y paramilitar Marquitos Figueroa.
El senador Ernesto Macías, presidente del senado en el año 2018, se hizo célebre porque se graduó como comunicador social sin tener el título de bachiller. El ex presidente y ex senador Álvaro Uribe de quien hay mucho que hablar, pero es tan amplio y cuestionado su tránsito por la política, que no bastaría una resma de papel para escribir sobre él, por eso, los remito con Daniel Mendoza, creador y productor de la serie Matarife, que se llevó dos premios India Catalina este año 2021 en Cartagena. En este link podrán ver la primera y la segunda temporada: Ver.
En lo regional, aunque hay mucha tela de donde cortar, se roban las primeras páginas, la familia Aguilar quien en cabeza del patriarca Hugo Eliodoro Aguilar, fue condenado por la justicia penal y disciplinaria por haber tenido nexos con las auto defensas unidas de Colombia. Estando en libertad condicional fue nuevamente detenido porque se declaró insolvente para pagar la multa que le fue impuesta de 10.750 salarios mínimos legales vigentes, sin embargo, fue visto en Bucaramanga en automóvil de alta gama, un Porsche avaluado en 370 millones de pesos, contrariando la insolvencia que manifestaba.
Lo más reciente es la captura del hijo del coronel, Richard Aguilar, ex gobernador y ex senador porque renunció a su curul días después de su captura, a él se le acusa de interés indebido en la celebración de contratos, peculado y concierto para delinquir, por cuatro mega obras, entre ellas el arreglo de la unidad deportiva Alfonso López.
En lo local, en muchos concejos del país con algunas excepciones, está ausente la sapiencia, la cultura, el conocimiento, el debate, la educación, el estudio, el rigor, allí predomina la ramplonería, la bobería, la nimiedad, la frivolidad, está lleno de exhibicionismo mediático, se interesan más por los like o me gusta en Facebook, YouTube, Tiktok e Instagram, Bucaramanga no escapa a ello.
Este actuar de algunos concejales faranduleros, quienes, con alzar la voz, gritar, hablar exacerbado, muy seguramente les genere réditos políticos y tal vez los reelijan por varios períodos, pero, hablando a calzón quitao, ¿y eso como para qué sirve?, veamos estos ejemplos de algunos personajes políticos, díscolos y faranduleros de orden nacional, ¿recuerdan al senador Carlos Moreno de Caro?, tenía buena oratoria, y era el que se vestía de rata, de buitre en las sesiones del Congreso; igualmente otro personaje de esa misma “estirpe de alternativos”, el Cura Bernardo Hoyos, ex alcalde Barranquilla, quien descalificaba y “putiaba” a todo el mundo y miren como terminó: condenado a siete años por corrupto con doce años de inhabilidad para ejercer cargos públicos por la Procuraduría.
Muy seguramente algunos lectores se irán lanza en ristre contra el suscrito, pero antes de opinar, favor remitirse a este link para que todo lo que vayan a decir lo hagan con argumentos y no entren en la difamación, el improperio y la mentira.
Si creemos que hemos mejorado en seguridad, empleo, educación, salud, infraestructura, oportunidades con la vieja y nueva clase política, sigamos votando por incompetentes, que Laurence J. Peter y Raymond Hull, son unos parlanchines.
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*Licenciado en música, artista, docente, compositor del himno de Bucaramanga, exconcejal de Bucaramanga.
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