La oposición en Nicaragua desafía al mandatario Daniel Ortega, pese a los arrestos contra aspirantes a la Presidencia.
Óscar Sobalvarro, de 60 años, un exmilitar y excomandante de la Resistencia Nicaragüense que combatió contra el primer Gobierno sandinista, entre 1979 y 1990, es el candidato presidencial de la Alianza Ciudadanos por la Libertad. Su fórmula a la Vicepresidencia es la exreina de belleza Berenice Sequeira, de 27 años, fue Miss Nicaragua en 2017.
Ambos desafiarán las intenciones de Ortega de reelegirse en los comicios del próximo 7 de noviembre para un cuarto mandato consecutivo de cinco años, con los que extendería sus 14 años en el Ejecutivo desde que regresó al poder en 2007. También lideró anteriormente al país desde 1979 hasta 1990.
Sobalvarro y Sequeira fueron confirmados como candidatos en una ceremonia en la que la presidenta de la Alianza, Kitty Monterrey, destacó su “valentía” por aceptar la postulación.
Entre las figuras detenidas que han despertado reclamos por su liberación se encuentra Cristiana Chamorro, que presentaba las mayores posibilidades de ganar en los comicios, según una encuesta de la firma CID Gallup. Es hija de la exmandataria Violeta Barrios de Chamorro, quien gobernó entre 1990-1997. Está acusada por los delitos de supuesta gestión abusiva y falsedad ideológica, lavado de dinero, bienes y activos y traición a la patria.
Otros tres de los detenidos, que están siendo investigados por supuesta traición a la patria, y estaban inscritos como precandidatos a la Presidencia de la Alianza, son Arturo Cruz, Juan Sebastián Chamorro y Noel Vidaurre.
Además, fueron capturados los aspirantes al Ejecutivo Félix Maradiaga, Miguel Mora y Medardo Mairena. Otros dos abandonaron Nicaragua por temor a ser detenidos. La postulación de candidaturas vence el próximo 2 de agosto.
Gobierno ordena el cierre de 24 oenegés
A petición del presidente Daniel Ortega, el Legislativo, de mayoría oficialista, canceló la personalidad jurídica a 24 oenegés. 20 de ellas se dedicaban a atención médica y cuatro se enfocaban en actividades comunitarias.
Entre las organizaciones afectadas están la Asociación Nicaragüense de Infectología, Asociación Liga Nacional contra la Leucemia y el Cáncer en el Niño «Julio Cortázar», la Asociación Acción Internacional por la Salud Nicaragua (AIS-Nicaragua), la Asociación Nicaragüense de Diabetología (Anidiab) y la Asociación Nicaragüense de Neumología (Anine).
«En incumplimiento a la Ley General Sobre Personas Jurídicas Sin Fines de Lucro, y a solicitud de la Dirección de Registro y Control de Asociaciones del Ministerio de Gobernación, la Asamblea Nacional aprobó con 72 votos la cancelación de 24 personalidades jurídicas», informó la Asamblea Nacional de Nicaragua, tras la decisión.
La medida fue justificada por supuestamente «obstaculizar la labor de control y vigilancia del Departamento de Registro y Control de Asociaciones del Ministerio de Gobernación».
Pero los cierres se producen en medio de los cuestionamientos de estas organizaciones al Gobierno por su manejo de la pandemia del Covid-19, pues Nicaragua fue uno de los pocos países que no implementó restricciones para evitar la propagación del virus.
Las asociaciones médicas clausuradas también refutaron los datos presentados por las autoridades sobre muertes y contagios. Oficialmente, el país reporta alrededor de 9.600 casos. Sin embargo, la cifra no resulta creíble para grupos médicos independientes.