La Policía de Haití anunció este viernes 9 de julio que arrestó a tres personas más. Es decir que, hasta ahora, han capturado a 18 colombianos y dos estadounidenses, a quienes las autoridades haitianas señalan como los presuntos responsables del asesinato del presidente Jovenel Moïse, sin que todavía haya un juicio que lo confirme o lo niegue. El homicidio ocurrió en la madrugada del 7 de julio.
De los estadounidenses no se ha conocido más información que la revelada el pasado 8 de julio, cuando la policía de Haití afirmó que los detenidos son James Solages y Joseph Vincent. Ambos son ciudadanos del país norteamericano y de ascendencia haitiana.
Por su parte, las autoridades de EE. UU. continúan renuentes a dar información sobre ellos. “Ciertamente, estamos al tanto del arresto de los dos ciudadanos estadounidenses que se encuentran en Haití y continuamos monitoreando de cerca la situación. Sin embargo, debido a las consideraciones de privacidad, no vamos a comentar más. Las autoridades haitianas son las indicadas para cualquier información adicional sobre su investigación (periodística)”, le indicó Jalina Porter, portavoz adjunta del Departamento de Estado, a los reporteros en una conferencia de prensa este viernes.
En cuanto a los colombianos, la misma fuerza pública del país sudamericano confirmó que al menos 13 de los posibles implicados son soldados retirados del Ejército. El director de la Policía Nacional, general Jorge Luis Vargas, explicó que la Oficina Central que tiene Interpol en Haití le envió dos informaciones a la Oficina Central que tiene el organismo en Colombia.
“Las verificaciones que hemos hecho en sus hojas de vida está que sus retiros ocurrieron entre el 2018 y el 2020, eso es lo que se tiene registrado”, explicó el general Vargas durante una rueda de prensa este viernes.
Además, la Policía colombiana recibió la información de cuatro empresas que estarían involucradas en el reclutamiento de mercenarios. Aunque no dieron los nombres de esas empresas ni afirmaron que estuvieran detrás del asesinato de Moïse, las autoridades colombianas ya identificaron que fueron ellas las que organizaron los viajes de los militares retirados hasta la nación del Caribe.
De hecho, la Policía colombiana tiene detalles de los vuelos. El general Vargas reveló que los militares retirados Duberney Capador Giraldo y Germán Alejandro Rivera García, el primero abatido y el segundo detenido, viajaron el 6 de mayo desde Bogotá hasta Panamá y de allí hacia Santo Domingo, la capital dominicana. Se quedaron en la ciudad cuatro días y el 10 de mayo volaron a Puerto Príncipe.
El segundo grupo de colombianos voló desde Bogotá hasta la ciudad turística de Punta Cana el 4 de junio. De allí, atravesaron toda República Dominicana hasta que, finalmente, el 7 de junio cruzaron a Haití por el paso fronterizo de Carrizal. Este es uno de los pasos oficiales más importantes y por donde atraviesa gran parte del comercio entre los dos países caribeños.
Todavía no se ha develado quién contrató a los militares retirados ni cómo fue esa operación. Aunque el general Vargas apunta a cuáles podrían ser las causas para atraerlos. “Las motivaciones en el mercado mercenario (…) están alrededor de temas netamente económicos, presumimos nosotros y es lo que hemos podido verificar hasta el momento”, detalló el oficial.
Esto coincide con una llamada que recibió este viernes la emisora local La W Radio. Una mujer, que solo se identificó como Yuli, aseguró ser la esposa de Francisco Eladio Uribe Ochoa, uno de los soldados retirados detenidos en Haití.
Yuli afirmó que su esposo fue reclutado por una empresa de seguridad para viajar a República Dominicana en junio y que quien lo contactó fue un hombre de apellido Capador. En efecto, la Policía colombiana reveló que Uribe fue uno de los 10 hombres que viajaron a Punta Cana para luego cruzar a Haití en junio. Y el apellido del posible reclutador es el mismo de Duberney Capador Giraldo, quien llegó a Puerto Príncipe desde mayo, según la inteligencia colombiana, y fue uno de los abatidos esta semana.
La mujer agregó que Uribe recibió 2.700 dólares al mes a cambio de brindar protección a algunas familias poderosas. Según ella, la última vez que habló con su esposo fue el jueves 8 de julio. Es decir, un día después del asesinato de Moïse. En la conversación por WhatsApp, Uribe le dijo que él y sus compañeros “estaban resguardados porque los estaban buscando”, pero que él “no entendía muy bien lo que estaba pasando”. “Fue una conversación muy vaga”, sostuvo Yuli.
Además, el exsoldado Uribe tiene cuentas pendientes ante el organismo de justicia transicional de Colombia -JEP- por haber estado presuntamente implicado en varias ejecuciones extrajudiciales de civiles que, luego, fueron presentados como guerrilleros. Estos tipos de crímenes se conocen popularmente como ‘falsos positivos’.
Pero todavía sigue siendo todo un misterio quién está detrás del comando o cuál era su intención para asesinar al presidente Moïse. Tampoco hay claridad sobre la relación entre los colombianos, los estadounidenses y las cuatro empresas presuntamente implicadas.
Un fiscal cita a cuatro personas de la seguridad de Moïse
En medio de la incógnita sobre el caso, surgió una posible nueva arista. La agencia EFE conoció una citación con la que el fiscal Bed-Ford Claude, del Tribunal de Primera Instancia de Puerto Príncipe, convocó a declarar a los cuatro principales responsables de la seguridad del presidente Moïse.
Ellos tendrán que acudir al Tribunal entre el lunes y el jueves de la semana próxima, aunque las citaciones no aclaran si fueron convocados en calidad de investigados o de testigos.
Sin embargo, el medio colombiano El Tiempo reveló que, según un testigo, los militares colombianos habrían llegado a la casa del mandatario haitiano más de una hora después de que fue asesinado y que ellos fueron contratados para prestar servicios de seguridad. La investigación periodística afirma que dos de los miembros del anillo de seguridad de Moïse están siendo investigados por el homicidio.
Las autoridades haitianas no han informado sobre muertos o heridos entre los miembros del equipo de seguridad que custodiaba la residencia presidencial en el momento del ataque. Hasta ahora, las únicas víctimas que se conocen son el propio Moïse, quien recibió 12 disparos; y su esposa Martine Moise, quien resultó herida y se encuentra en estado crítico en un hospital de Miami, Estados Unidos.
Enviarán grupos de inteligencia para cooperar con el caso
Lo que sí es cierto es que la posible implicación de un grupo de mercenarios en el magnicidio del presidente haitiano ha causado revuelo internacional, al punto que tanto el Gobierno de Estados Unidos como el de Colombia expresaron que enviarán equipos de inteligencia para cooperar con la investigación del homicidio.
“En respuesta a la solicitud del gobierno haitiano de seguridad e investigación, enviaremos a altos funcionarios del FBI y del Departamento de Seguridad Nacional a Puerto Príncipe lo antes posible para evaluar la situación y cómo podemos ayudar”, afirmó la secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, durante una conferencia con los periodistas.
Además, el secretario de Estado de EE. UU., Antony Blinken, conversó con el primer ministro interino Claude Joseph, según afirmó Jalina Porter, portavoz adjunta principal del Departamento de Estado.
Lo mismo hizo el presidente colombiano, Iván Duque. El mandatario sostuvo a través de su cuenta de Twitter que habló con Joseph y que le ofreció la ayuda de las autoridades del país sudamericano para esclarecer el crimen.
Posteriormente, el director de la Policía colombiana aseguró que ya se designó al equipo que viajará a Puerto Príncipe. Este estará conformado por miembros de la Oficina Central de Interpol en Colombia; el director de la Dirección Nacional de Inteligencia, almirante Rodolfo Amaya; y el director de Inteligencia Policial, general Norberto Mujica.
El general Vargas agregó que ya enviaron toda la información que tienen hasta ahora las autoridades colombianas, como los datos de los vuelos o las identidades de los detenidos. Pero todavía sigue siendo un misterio quiénes asesinaron a Moïse y por qué lo hicieron.