Por: Reinaldo Pérez Flórez/ Hace ya varios siglos el oro en nuestro continente ayudó a que se construyeran relatos de nuestra realidad, alimentando la imaginación de cartógrafos de la época o aún peor, la ambición y las fantasías de criminales conquistadores; como lo señala el maestro Galeano en una de sus obras.
Estos bárbaros disfrazados de colonizadores llegaron a pensar que la ciudad amurallada de Cartagena, las gallinas tenían en su molleja piedrecitas de oro, creando un absurdo imaginario que aún nos persigue hasta nuestros días, desdibujando nuestra realidad y con tanta locura desmedida fortaleciendo la brecha social en nuestro continente, todo por la búsqueda del precioso metal.
Después que nuestros territorios fueron ocupados por la avaricia, gracias a la brutalidad colonial, la ciencia y la iglesia, haciendo el papel de notarios de la historia, trajeron la deshumanizada Expedición Botánica. Esta expedición sirvió para que perdieran muchas vidas de nuestros padres indígenas, esto jamás fue una Expedición Botánica, la caracterización de plantas y animales, el gran José Celestino Mutis y su equipo de botánicos con vocación minera, se la encontró en el camino el eminente botánico. Lo que buscaba era el preciado metal, oro, todo muy bien justificado por la “Real Expedición Botánica del Reino de Granada”, llegando a la Montuosa Alta donde su hermano fue el primer alcalde de la zona, ¿adivinen a que sistema montañoso pertenece este sector?, Paramo de Santurbán.
La historia de este sistema montañoso ha estado siempre ligado a la violencia, todos los grupos al margen de la Ley hicieron presencia en este territorio, la V Brigada del Ejército tiene un batallón de alta montaña en la zona, que, según mi opinión personal, ha servido para salvaguardar la vida de sus habitantes, pero también los intereses de la minería industrializada o como lo llaman los ejércitos ambientalistas, (Megaminería).
Municipios como California y Vetas, ancestralmente han vivido de la minería artesanal, gracias a ese preciado metal sus habitantes siempre han sido víctimas de la violencia, pero también del abandono estatal, oportunidad que la mega industria no ha desaprovechado para hacer presencia con sus proyectos y capitales, muchas veces sustituyendo al Estado en sus deberes constitucionales.
Ahora la violencia generada en contra de los habitantes de esta región esta generalizada, la violencia social y la violencia administrativa se están volviendo el pan de cada día para quienes han habitado el páramo por más de 400 años.
Al estar dentro de la línea de paramo y no poder hacer productiva su propiedad, van a obligar a que, en nuestra ciudad, tengamos un desplazamiento masivo de habitantes de la región que lo único que han sabido hacer por siglos es minería artesanal.
Habitantes del municipio de Vetas, como Inocencia Arias hablan sin ninguna esperanza frente a este tema:
“Nosotros pedimos que nos dejen trabajar, que dejen trabajar los jóvenes en la minería artesanal, porque aquí no tenemos más recursos de nada, en la agricultura, nosotros no tenemos recursos para salir a ningún otro lado, entonces nos tocaría irnos a pedir la limosna, ¿a dónde?, ¿a Bucaramanga?, ni conocemos, entonces le pedimos que nos dejen trabajar la minería artesanal, la agricultura, porque que más”.
Y es que el municipio de Vetas estaría condenado a desaparecer ya que el 100% de sus tierras quedarían dentro de la línea de paramo, por lo cual el alcalde de Vetas les formuló esta pregunta a la Duma de Santander: ¿Quién va hacer la Ordenanza para que desaparezca Vetas del mapa?
Los diputados del departamento están unidos para proteger el páramo, su agua, pero ante todo dar soluciones a sus habitantes, lo que necesitan saber los Vétanos es el cómo.
Desafortunadamente quienes no estuvieron a la altura fueron varios sectores ambientalistas que criminalizaron al único representante de Santurbán que había asistido a este debate de control político en favor del páramo, el alcalde de Vetas.
El diálogo entre ciudadanos en el tema Santurbán debe ser humanizado, según nuestro alcalde de Bucaramanga Juan Carlos Cárdenas, los habitantes de Santurbán tienen 8.000 razones para estar tranquilos, recursos que se generarían gracias al acueducto de nuestra ciudad, (otra joya de la corona). No es la primera vez que a los habitantes del Páramo les ofrecen este tipo de recursos, esperemos que esta vez sea una solución real para ellos.
Tengamos en cuenta que la gente de Santurbán tiene la misma importancia que el recurso hídrico que nosotros consumimos, pero que no cuidamos; recordemos que la minería lo abarca todo, tengan en cuenta que aun somos dependientes de ella, desafortunadamente no a todos les duele el tema, como a los habitantes de Vetas o California, temas que no nos pueden llevar a un escenario de polarización que para algunos es electoralmente correcto, el Estado Social de Derecho, da soluciones reales, el Estado de Opinión, no, en especial si tenemos este enorme pasivo social con quienes han cuidado por siglos del agua que consumimos.
Correo: reyinaldpf77@gmail.com
Twitter: @reyinaldf77