Las posiciones de los líderes políticos de la región están divididas con respecto a la transparencia y legitimidad del proceso democrático en Venezuela para la elección presidencial que, luego de seis horas de escrutinio, llevó al resultado de la votación definida con el 51,2% de los votos (5.150.092 apoyos), por los que la presidencia de ese país de Latinoamérica nuevamente queda en manos de Nicolás Maduro, el sucesor de Hugo Chávez.
Antony Blinken, secretario de estado de Estados Unidos se pronunció coherente con su país, que ha sido crítico y opositor desde la llegada de Maduro al poder por primera vez en 2013 y quien ha implementado sanciones económicas contra su gobierno y ha apoyado a la oposición:
Hemos visto el anuncio hace un momento de la comisión electoral venezolana. Nos preocupa seriamente que el resultado anunciado no refleje la voluntad ni los votos del pueblo venezolano.
El presidente argentino, Javier Milei, anti-socialismo y regímenes autoritarios, que ha mencionado a Venezuela como un ejemplo del fracaso de estas ideologías, afirmó: “Argentina no reconocerá otro fraude y espera que esta vez las Fuerzas Armadas defiendan la democracia y la voluntad popular”
Por su parte Gabriel Boric, presidente de Chile, de alineación de izquierda, pero crítico de la situación de los derechos humanos en Venezuela, creyente de una solución democrática y quien ha mostrado solidaridad con los migrantes venezolanos, encuentra los resultados difíciles de creer, por lo que señaló:
La comunidad internacional y especialmente el pueblo venezolano, incluidos los millones de venezolanos en el exilio, exigen total transparencia… Desde Chile no reconoceremos ningún resultado que no sea verificable.
El presidente uruguayo Luis Lacalle Pou, quien ha calificado de dictadura al gobierno venezolano y en espacios públicos internacionales como la Celac ha señalado la inhabilitación de líderes opositores como María Corina Machado como evidencia de la ausencia de voluntad para permitir elecciones transparentes, ha sido enfático:
¡Así no! Era un secreto a voces. Iban a ‘ganar’ independientemente de los resultados reales. El proceso hasta el día de las elecciones y el recuento estuvo claramente viciado. No se puede reconocer un triunfo si no se puede confiar en las formas y los mecanismos utilizados para lograrlo.
De postura contundente la presidencia de Costa Rica, que desde 2019 ha reconocido a Juan Guaidó como el presidente legítimo de Venezuela, sin aceptar el mandato de Maduro, el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves Robles, emitió una declaración calificando la proclamación de Maduro como «fraudulenta», este fue su mensaje:
Rechazamos categóricamente la proclamación de Nicolás Maduro como presidente de la República Bolivariana de Venezuela, la cual consideramos fraudulenta. Trabajaremos con los gobiernos democráticos del continente y los organismos internacionales para que se respete la sagrada voluntad del pueblo venezolano
Los cuatro de la izquierda inamovible
Firme al apoyo que le ha dado a Nicolás Maduro, el presidente cubano Miguel Diaz-Canel, quien en varias declaraciones ha subrayado la solidaridad cubana con la Revolución Bolivariana y la unidad cívico-militar en Venezuela, dijo:
Nicolás Maduro, hermano, tu victoria, que es la del pueblo bolivariano y chavista, ha derrotado limpia e inequívocamente a la oposición proimperialista. También derrotaron a la derecha regional, intervencionista y monroísta. Habló el pueblo y ganó la Revolución.
El expresidente Raúl Castro habló por teléfono con Maduro para felicitarlo, según la oficina de Díaz-Canel.
Como parte del bloque de países cercanos al gobierno de Venezuela, la presidenta de Honduras, Xiomara Castro, que en enero de 2024 le otorgó a Maduro la Orden Francisco Morazán en el grado de Gran Cruz Placa de Oro, la máxima distinción que el gobierno hondureño para líderes internacionales, felicitó al mandatario:
Hemos seguido de cerca esta fiesta democrática y saludamos que se haya respetado la voluntad del pueblo venezolano en las urnas. Queremos ratificar nuestra voluntad de continuar fortaleciendo nuestros lazos de amistad, cooperación y solidaridad con la República Bolivariana de Venezuela.
El gobierno de Nicaragua, que comparte afinidades ideológicas y políticas con el actual gobierno venezolano, alimentadas en su oposición a Estados Unidos y el intervencionismo en América Latina, felicitó a Maduro.
El presidente Daniel Ortega, y su esposa y vicepresidenta, Rosario Murillo, en una carta divulgada poco después del primer boletín del CNE, expresaron:
Querido compañero y hermano Nicolás: En plena hermandad revolucionaria y evolucionaria, desde esta Nicaragua bendita, y siempre libre, nuestro abrazo de siempre, saludando la gran victoria que ese pueblo heroico entrega al comandante eterno (Hugo Chávez), en su cumpleaños.