Por: Harold Jesús Durán Durán/ Para entrar en contexto y colocándonos un poco más técnicos, el Fenómeno de la Niña está definido como un fenómeno oceánico caracterizado por el enfriamiento de las aguas superficiales de la parte central y oriental del Pacífico ecuatorial y por cambios en la circulación atmosférica tropical, lo que repercute en la temperatura y genera precipitaciones de manera más fácil.
El tema es que como lo mencione en anteriores columnas sobre el cambio climático, “La Niña” se nos creció. Es por eso que ahora vemos con mucho asombro como una llovizna simple en cuestión de minutos se vuelve una tempestad, que arrasa con carros, motos, bicicletas, y todo lo que se atraviese en su camino. Y no, no es normal empezar a decir “la naturaleza recupera lo que es suyo”.
“Quiero detenerme un momento en este mundo para invitarlo a leer nuevamente mi columna “El cambio es… climático” para entender un poco de los efectos que se generan al no cuidar nuestro planeta tierra.”
Volviendo al tema, en un 70% de probabilidades según el Ideam, en nuestra Republica de Colombia existe la posibilidad de que durante los meses de agosto a noviembre experimentemos el conocido Fenómeno de la Niña. Y es que no fue suficiente con experimentar durante el primer semestre del 2024 al Fenómeno del Niño y sus intensos calores para predecir fácilmente que “La Niña” viene con abundante agua.
Por eso es importante que cada uno de nosotros nos preparemos para enfrentar las diversas dificultades que esto trae; como los deslizamientos, perdidas de la bancada en las diferentes vías, afectación a barrios enteros, familias que pierden todo su esfuerzo en un aguacero, daños en la infraestructura física de edificios, la gotera de la casa, el colapso de las vías por que se inundan las calles y no puedo pasar por alto, las enfermedades.
El título de la presente columna no es en vano, resulta que, por la época de lluvias y bajas temperaturas, los principales afectados son nuestras niñas, niños y ancianos, pero también las mujeres en estado de embrazo y personas en situación de discapacidad.
En cuanto a enfermedades se trata, especialmente se pueden presentar con más frecuencia las respiratorias, también las transmitidas por vectores, las enfermedades diarreicas agudas y de acuerdo a ciertas regiones hay mayor riesgo de accidentes ofídicos o mordeduras por serpientes.
A nivel respiratorio y en la población que antes mencione, se pueden experimentar diversos síntomas como fiebre malestar general, dolor de cabeza, lagrimeo constante, secreción nasal, en algunas ocasiones tos. La gran mayoría de estos cuadros clínicos son ocasionados por los diversos virus que se mantienen en el ambiente y que tienden a aumentar y variar su capacidad para generar un mayor número de infecciones, por eso en caso de experimentar alguno de estos síntomas es importante que realice uso del tapabocas con la finalidad de no contagiar a otras personas.
En esta misma línea existen complicaciones que se generan a raíz de estos cuadros respiratorios como lo son exacerbación de rinitis, crisis asmáticas, complicaciones en las personas que sufren de Epoc, empeoramiento de cuadros alérgicos y neumonías. Es por ello que una de las recomendaciones más importantes que quiero dejar en estas líneas es la ¡no automedicación! Es importante acudir de manera oportuna al médico para consultar y recibir orientación acerca del tratamiento más indicado para el curso de la enfermedad.
Como médico les digo: Sigan las indicaciones dadas por el profesional de salud al que acudan, no se automediquen ni mucho menos automediquen a los menores de edad ni a los ancianos quienes sufren las mayores consecuencias de estos actos, no se apresuren a dar medicamentos antibióticos sin necesidad, utilicen de manera oportuna y adecuada los elementos de protección personal, acostúmbrense a lavarse las manos de manera permanente y tampoco use remedios caseros a base de plantas o hiervas “medicinales” las cuales pueden ser perjudiciales para algunas personas.
Como lo he expresado en algunas oportunidades, el cambio climático es inminente, pasamos de una de las temporadas más calurosas de los últimos tiempos y se avecina una nueva temporada de lluvias que puede ser de las más fuertes que hayamos vivido. Como recomendación adicional, no espere a que los gobiernos realicen lo que usted debe realizar por su vida y su salud, no es culpa de los gobiernos de turno todo lo que sucede, y si recuerdan algo, esta es la misma película que se vive cada año.
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*Médico especialista en gerencia de instituciones de salud y gerencia estratégica de proyectos.
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