En cumplimiento de la instrucción del presidente Gustavo Petro Urrego de recuperar el orden público en la zona del Catatumbo, en Norte de Santander, el Ministerio de Defensa confirmó la destrucción de 36 instalaciones clandestinas dedicadas al procesamiento de pasta de coca y de nueve laboratorios para el procesamiento de clorhidrato de cocaína.
Estos resultados hacen parte de la ofensiva que desarrolla la Fuerza Pública y que intensificó en las últimas semanas para transmitir un mensaje claro al Eln y al frente 33 de las disidencias: el camino hacia la desmovilización y el retorno a la legalidad es su mejor opción.
En cuanto a desmovilizaciones, la acción del Ejército ha permitido que 110 personas que hacían parte de estas estructuras criminales entregaran sus armas, 30 menores de edad fueron rescatados, 24 terminaron capturados y dos murieron al enfrentarse a las tropas militares.
En los operativos se han incautado 120 fusiles y más de 60 pistolas, se confiscaron dos toneladas de explosivos, cerca de 600 Minas antipersona y la munición decomisada supera los 50 cartuchos.
En cuanto despliegue de fuerza, el Ejército ha dispuesto de 1.150 soldados adicionales para reforzar las misiones y ya completa los 9.500 uniformados, incluyendo 450 miembros de las fuerzas especiales.
En cuanto a la Policía, al área de conflicto ha enviado 500 efectivos pertenecientes a los comandos Jungla y del Comando de Operaciones Especiales (copes) para reforzar las acciones contra el narcotráfico. Lo mismo que un equipo de 22 integrantes del Grupo de Vida de Policía Judicial, a cargo del esclarecimiento de homicidios.
El Ministerio de Defensa ha confirmado que nuevas operaciones militares y policiales se encuentran en curso con el objetivo de consolidar el control del territorio para el pronto retorno de las comunidades desplazadas.
- (Con información del Ministerio de Defensa y el Ejército Nacional)